La anunciada y necesaria lluvia hizo que se viviera un Martes Santo diferente, más íntimo, aunque también con incertidumbre, en tres parroquias de Montilla. La Vera Cruz y Santa Cena decidieron quedarse en sus templos, mientras que la Humildad y Caridad decidió esperar y salir una hora después, aunque tuvo que volver tras sus pasos al aparecer la lluvia antes de lo esperado.
La Franciscana Cofradía de Ntro. Padre Jesús de la Humildad y Paciencia y María Stma. de la Caridad en sus tristezas y San Francisco Solano, quiso abrir las puertas de su templo para celebrar con sus hermanos y devotos el XXX Aniversario y dedicar la salida al joven Miguel Ángel Sastre, contraguía de la Virgen, fallecido el pasado mes de octubre.
Mucha emoción en la salida de esta franciscana cofradía que tuvo que volver tras sus pasos, por calle Escuelas, cuando llevaba una hora de recorrido. La lluvia llegó antes de lo esperado y cogió al Señor en la calle Don Diego de Alvear y a la Virgen en la calle Herradores, aunque fue una breve lluvia lo que permitió a la Hermandad volver a su templo.
Información e imágenes: CarminaLeiva-NuestraVoz
