Numerosos personas junto a sus animales de compañía se han congregado en el atrio de la Parroquia de San Francisco Solano donde el párroco, Florencio Muñoz, como manda la tradición ha bendecido a los animales, en su mayoría perros y gatos.

Tras la misa del domingo en un sencillo acto a las puertas del templo, el párroco ha bendecido uno por uno a los animales, momento en que sus dueños han mostrado la alegría de poder proteger a sus fieles compañeros.

Por segundo año consecutivo y con buena acogida, la Parroquia del Santo ha celebrado la Fiesta de San Antón, que, aunque se conmemora el 17 de enero, se ha pasado al domingo para facilitar que se pueda llevar a las mascotas.

San Antonio Abad, conocido como San Antón, es una fiesta que se conserva en el calendario litúrgico con una tradición muy arraigada de bendecir a los animales, vinculada a la devoción popular a San Antón.

Cuenta la historia que San Antonio Abad fue un monje cristiano, nacido en Egipto en el año 250. Tras perder a sus padres con 20 años decidió retirarse a orar y vivir en soledad, como ermitaño, solo acompañado de animales, sobre los cuales se cuentan numerosos milagros atribuidos al santo. Se cree que la tradición de bendecir a los animales proviene de la época en la que San Antón descubrió la sabiduría a base de observar a los animales y al amor divino a través de la naturaleza y así comenzó a ser el patrón de los animales.

Desde el siglo IX, la tradición ha dictado que el 17 de enero sea un día de bendición para los animales, buscando la protección del santo egipcio.