
La campaña de 2025 llega con un nuevo reto para los viticultores de la zona Montilla-Moriles: el mildiu. Las lluvias de marzo, abril y mayo, han creado el escenario perfecto para que este hongo prolifere con fuerza en la comarca.
Para entender el alcance de la situación, hemos hablado con Ángela Portero, Ingeniera Agrónoma y técnica del Aulade Viticultura del Consejo Regulador de la DO Montilla-Moriles, este año se han dado las condiciones meteorológicas idóneas para que el mildiu infecte con varias generaciones seguidas. «Las lluvias han coincidido con fases críticas del desarrollo de la vid», explica. Desde mediados de abril, cuando aparecieron las primeras manchas, hasta las tormentas de finales de mayo, el hongo ha seguido extendiéndose, afectando tanto a hojas como a racimos.
Además, la experta advierte que «el mildiu no da una segunda oportunidad»: donde ha caído el hongo, la producción ya se ha perdido. Por ello, desde el Consejo Regulador se ha impulsado una declaración de daños que cada agricultor puede presentar para valorar el impacto en sus parcelas y canalizarlo hacia la administración autonómica.
Entrevista/ Ángela Portero nos da las claves para comprender lo que está ocurriendo en el viñedo: