En menos de una semana han accedido ilegalmente a una decena de viviendas en la zona de La Toba.
Ante la falta de una respuesta institucional suficiente, los residentes han empezado a coordinarse entre sí para alertarse mutuamente, compartir información y avisar a los cuerpos de seguridad
Vecinos de La Toba han denunciado la oleada de robos que se están produciendo en las últimas semanas. Aseguran que «en menos de una semana han accedido ilegalmente a una decena de viviendas en la zona de La Toba, registrándose al menos tres robos con fuerza consumados». Los residentes reclaman a las autoridades una respuesta urgente y un refuerzo inmediato de la seguridad.
La población de esta barriada se siente desbordada y vulnerable ante una oleada delictiva que, según denuncian, no tiene precedentes en las últimas décadas. En los últimos días se han contabilizado varios robos en domicilios situados en las inmediaciones del Camino de los Coches, además de múltiples tentativas de intrusión. “Estamos viviendo una situación gravísima; los delincuentes actúan con total impunidad en este barrio”, afirma Antonio, uno de los vecinos afectados.
Especialmente preocupante fue la tarde del pasado viernes, cuando llegaron a forzarse hasta cinco viviendas en apenas unas horas. Muchos residentes reconocen que ya no se atreven a ausentarse de sus casas por temor a sufrir un robo. Hablan de un escenario marcado por robos con fuerza, allanamientos y entradas frustradas únicamente gracias a sistemas de alarma o a la resistencia de las cerraduras.
Ante esta situación, los vecinos exigen la adopción de medidas extraordinarias que permitan frenar la escalada delictiva. “Pedimos a las administraciones que actúen, que se incrementen los recursos policiales y se adopten soluciones acordes a un problema que no se veía desde hace al menos veinte años. No podemos seguir viviendo con miedo”, subrayan.
Organización vecinal
Ante la falta de una respuesta institucional suficiente, los residentes han empezado a coordinarse entre sí para alertarse mutuamente, compartir información y avisar a los cuerpos de seguridad si detectan movimientos sospechosos. Aun así, son conscientes de que su esfuerzo solo será efectivo si se refuerza la vigilancia policial y se patrulla con mayor frecuencia en los puntos más conflictivos del barrio.
Carencias estructurales
Los afectados tienen previsto solicitar una reunión con el Ayuntamiento para reclamar un plan integral de seguridad, porque consideran que la situación es ya insostenible. Además, volverán a exigir mejoras en una zona que carece de servicios esenciales, pese a que la mayoría de las viviendas se utilizan como residencia habitual.
