
“Pasar por el Colegio Salesiano de Montilla imprime carácter”, “Aquí el espíritu de Don Bosco sigue vivo”, “Esta casa tiene mucho magnetismo”
Con motivo del 125 aniversario de la llegada de los Salesianos a Montilla, cerca de un centenar de maestros, profesores y personal administrativo y de servicios, tanto los que han pasado por el colegio como los que actualmente forman parte de él, se reunieron para celebrar esta significativa efeméride con un emotivo día de convivencia. El encuentro estuvo marcado por numerosos abrazos, reencuentros y momentos de profunda emoción.
El gran y memorable patio del colegio, las aulas y el santuario de María Auxiliadora acogieron este emotivo encuentro, que reunió a personas llegadas desde distintos puntos de Andalucía, algunas de las cuales no regresaban al centro desde hacía muchos años. Para el director de la Casa Salesiana de Montilla, Agustín de la Cruz «este acto es uno de los momentos más destacados del 125 aniversario, ya que estas personas han formado a generaciones de jóvenes y, tanto en este centro como en otros en los que han trabajado, han dejado la huella salesiana de Don Bosco.»

Los participantes destacaron la alegría de poder reencontrarse y compartir los recuerdos y vivencias que siempre han sido parte fundamental de la formación y el día a día en el Colegio Salesiano. Juan Villarejo, director de la Casa de Montilla durante dos años, cuando la comunidad religiosa se marchó, expresó su emoción al afirmar que «en esta casa, el espíritu de Don Bosco sigue vivo». Además, resaltó que, a pesar de que la situación educativa pueda ser complicada en ocasiones, «aquí estamos para ofrecer un mensaje y un servicio a Montilla».

Por su parte, Gabino Carmona, querido profesor y director del Colegio de Montilla entre 1999 y 2014, destacó el gran impacto y vigor de la casa salesiana, afirmando que «solo tengo palabras de agradecimiento al ver la herencia salesiana». En su intervención, también subrayó que «nuestra historia nunca ha sido fácil «y que, en la actualidad, «las personas al frente de la institución están plantando una semilla para asegurar que este legado siga adelante».


Manuel Ruz Feria, antiguo alumno y profesor del colegio durante el curso 1973-1974, mostró su alegría por participar en este acto, ya que siempre ha mantenido una relación cercana con la Casa Salesiana. Fue contundente al afirmar que «pasar por el colegio salesiano de Montilla imprime carácter y eso no se olvida nunca». Además, expresó su deseo de poder ampliar la formación en el colegio hasta el nivel de Bachillerato, para así completar la formación de los jóvenes. Finalmente, ofreció su consejo a los actuales profesores: «Recuerden siempre el legado y la enseñanza que esta casa ha transmitido a lo largo de los años.»


Este día de convivencia ha sido un recordatorio del impacto que la presencia salesiana ha tenido en la vida de tantas personas, y de cómo el espíritu de Don Bosco sigue vivo en Montilla, proyectándose hacia el futuro.