Soy solo un eslabón de la larga cadena de penitentes que han formado y han hecho grande a lo largo de la historia a la Misericordia..” 

El pasado sábado 11 de marzo la Hermandad de la Misericordia celebró el Pregón del 50º Aniversario, pronunciado por Manuel Ordoñez Gómez, una persona ligada a la Parroquia de San Sebastián y a la Hermandad desde su fundación, que nos dejó un pregón lleno de emoción, sentimiento, recuerdos y de historia viva de los 50 años de una hermandad que se ha mantenido fiel a sus orígenes.

Mi casa, ya estoy en casa, donde sus muros de historias plenas me llenan de paz, me llaman. Mi hogar, mi sitio, mi piel, donde mi alma cristiana encuentra un tacto en su cal que sabe a hogar y a fe…”, con estas palabras dedicadas a la Parroquia de San Sebastián abrió Manuel Ordóñez su pregón en el que dijo que es difícil expresar tantos años de hermandad “porque con palabras no se pueden expresar los sentimientos del alma”. “En mi pregón los recuerdos de los 50 años de hermandad se transforman en voluntad, en nostalgia y en lagrimas, al recordar a personas y momentos vividos en esta casa”.

El pregonero se mostró agradecido de haber sido elegido para poner voz a los 50 años de vida de la hermandad, aunque insistió en que “tan solo soy un eslabón de la larga cadena de penitentes que la han formado y la han hecho grande a lo largo de la historia”. Por ello dedicó la exaltación a todas las personas que han participado y en especial a los que ya no están. 

Pregonero 1

Sobre los orígenes de la Hermandad de la Misericordia, recordó que sus primeros años de vida laboral en la hostelería, le llevo a conocer a un grupo de personas vinculadas con la Semana Santa montillana, que celebraban tertulias cofrades y que en el año 1973 crearon la Agrupación de Cofradías, este mismo año, dijo “se unió a las hermandades montillanas, con gran ilusión, la del Stmo Cristo de la Misericordia”. 

“Guiados por el párroco de San Sebastián, don Andrés Cabezas, se dieron los primeros pasos para hacer estación de penitencia, en 1974, con unas directrices de austeridad, sencillez y recogimiento, junto con el ejercicio del vía crucis, que aún hoy se mantiene en estatutos”.

Pregón Manuel Ordoñez 2
Pregón Manuel Ordóñez

Seguidamente hizo un recorrido, a través de sus recuerdos, por los numerosos momentos vividos en las distintas actividades que se realizan a lo largo del año desde la Hermandad siempre ligada a la Parroquia. Veneraciones y sopaipas solidarias, el Belén viviente que se prepara cada Navidad en la Parroquia, la Candelá de San Sebastián, la Fiesta de la Cruz y un largo etc.

El pregonero se detuvo en la actividad que fue durante años fue seña de identidad de la hermandad, el Certamen de Saetas de la Misericordia, al que estuvo ligado como organizador, durante los 25 años que se realizó y al que el éxito y el volumen de trabajo y de gestión lo llevó a su fin.

Pregón Manuel Ordóñez 3

Recordó los preparativos de la estación de penitencia, el primer paso propio que consiguieron en 1976, en definitiva “50 años participando en la estación de penitencia de la Misericordia en la que espero seguir como hermano de luz todo el tiempo que mi cuerpo me lo permita”. 

Pregón Manuel Ordóñez 4

Un magnifico pregón en el que Manuel Ordoñez recogió en pinceladas la historia de “este medio siglo de trabajo y de orgullo”. Se refirió a los complicados años que se están viviendo por la falta de hermanos que ayuden a sacar la estación de penitencia aunque animó a la directiva a que no pierdan la ilusión.

Por último pidió a la hermandad “que se recopile la historia de estos cincuenta años y se deje como legado a las generaciones futuras para que se valore y se proteja un patrimonio que debe ser cuidado con mimo y respeto”.

Pregón Manuel Ordoñez 5

El pregonero fue presentado por su hija, Mirian Ordóñez, que tomo la palabra para allanarle el camino a su padre.. “es difícil presentar a una persona con la que mantienes un vínculo emocional tan cercano y mucho más en un lugar en el que tanto tiempo ha pasado y en el que tantas cosas ha vivido”.