Aunque todo estaba preparado para acompañar al Cristo Yacente en su Sepulcro y a María Santísima de la Soledad, por las calles de nuestra ciudad, la inestabilidad meteorológica prevista para la noche hizo que se quedaran dentro de San Agustín. Los hermanos y devotos, junto a las autoridades y a los representantes de las hermandades, participaron en San Agustín de unas reflexiones guiadas por el consiliario, David Reyes, y acompañadas por la música el trío de capilla “Dies Irae”.
Numerosas personas llegaron hasta San Agustín para contemplar de cerca las imágenes de la Pontificia Hermandad del Santo Entierro, Soledad y Angustia de la Madre de Dios (S.XVI-XVII) y acompañarlas durante unos minutos.
Se da la circunstancia que este mes de marzo, según las investigaciones del historiador Antonio Luis Jiménez, se ha celebrado el 350º aniversario de la donación de la imagen del Cristo Yacente y de su urna, a la Cofradía. Así lo recoge la escritura notarial otorgada entre los 122 devotos donantes y el hermano mayor de la cofradía, reunidos en la Capilla de la Soledad de San Agustín para asentar ante escribano público la entrega oficial a la cofradía el 19 de marzo de 1674.
Os dejamos imágenes de la noche del Viernes Santo en San Agustín:
Fotos: Antonio Herrador y NuestraVoz