Aunque para muchos suena a “ufff, ya empieza esto otra vez…”, el inicio de curso es mucho más que rutinas y madrugones. Es una oportunidad para construir, crecer, descubrir y convivir. ¿Y si miramos la escuela con otros ojos?

El maestro Paco Llopis comparte con todos nosotros su pasión por la Educación y nos invita a mirar este momento con otros ojos, reflexionando sobre el papel fundamental de la escuela en la vida de los niños, las familias, el profesorado y la sociedad.

No te pierdas esta reflexión sobre el papel transformador de la escuela, su sentido profundo y cómo todos —profesorado, familias, alumnado e instituciones— tenemos mucho que aportar.

La Opinión con la Voz y la Firma de Paco Llopis:

Texto de La Opinión:

¡Por fin ha comenzado el Curso Escolar!

Esta podría ser la frase que escucháramos a diario por parte del profesorado, las familias y el alumnado cuando da comienzo un nuevo curso escolar. Pero, por desgracia, las frases más repetidas van en otra dirección:
“Ufff, ya comienza el curso…”,
“Mañana empezamos, ¡vaya tela…!”,
“No tengo ninguna gana de que comience el curso…”.

Algunas familias ven el inicio como una bocanada de aire fresco tras un verano intenso, con el deseo de que empiece el colegio, los maestros eduquen a sus hijos y, por fin, puedan hacer sus cosas en paz.
Otras entienden que es
necesario para conciliar la vida laboral y familiar.
Y hay quienes opinan que ya está bien de vacaciones y que
el profesorado debe ponerse las pilas, porque “ya se lo han pasado suficientemente bien”.

Una parte del profesorado comenta sin reparo:
“¡Qué rápido se han pasado las vacaciones!”
Aunque en realidad, muchos no han tenido vacaciones o han sido muy reducidas.

Gran parte del profesorado, sin embargo, entiende que ya es hora de comenzar, viendo la escuela como un tiempo que no vuelve y esencial para la formación.

Otra parte del alumnado ve la escuela como “la guillotina que corta cabezas” o “el matadero donde degollar a los animales”… Un auténtico suplicio.

Y por supuesto, también hay familias que ven la escuela como un lugar de preparación y formación, donde el alumnado desarrolla competencias que le servirán en el futuro para encontrar su camino, construirse, y crecer como persona.

Así podríamos seguir enumerando casuísticas, reflexiones, experiencias y opiniones…
Por eso,
esta reflexión no está de más, y completa otras compartidas anteriormente en www.carminaleivanuestravoz.com que también puedes revisar

CUANDO COMIENZA EL CURSO ESCOLAR…

La Escuela, a mi entender, constituye el núcleo central y primordial de la educación, tanto en la comunidad como en la familia. Por tanto, su papel como institución debe ir enmarcado en dos direcciones:

  1. Formar y preparar al alumnado para lograr una formación integral.

  2. Prepararlos para la sociedad en la que se van a desenvolver.

La escuela debe convertirse en un aliciente, un espacio que fomente:

  • El disfrute de la vida en común,

  • El desarrollo de la curiosidad,

  • La alegría por aprender,

  • El descubrimiento de la propia identidad y habilidades,

  • Y la apertura a nuevas experiencias y relaciones.

Para ello, necesita ser un entorno seguro y estimulante, donde el alumnado se sienta valorado, participe en la toma de decisiones, y encuentre en el aprendizaje un camino hacia el placer y el gozo, en lugar de una imposición.



Para que la escuela sea así, hace falta que tanto profesorado, alumnado, familias e instituciones vayan en la misma dirección y respeten estas 10 sugerencias:

  1. Sea un espacio de socialización y disfrute colectivo:
    La escuela es un lugar privilegiado para desarrollar habilidades sociales y afectivas, convivir y compartir con otros de manera enriquecedora.

  2. Estimule la curiosidad y el descubrimiento:
    Al despertar el interés por lo desconocido, la escuela invita a explorar, aprender y disfrutar del conocimiento, haciendo que el acto de aprender sea un placer

  3. Desarrolle la identidad y el equilibrio personal:
    Ofrece un ámbito para el desarrollo de la personalidad, la inteligencia y el comportamiento, pilares fundamentales para la vida.

  4. Dé sentido de pertenencia y participación:
    Sentir que se forma parte de la comunidad escolar, que la opinión cuenta y que se participa activamente, es algo muy motivador

  5. Sirva para abrir posibilidades a la vida y a a las oportunidades que te puede ofrecer
    La escuela debe ser vista como una puerta de entrada a un mundo de
    posibilidades, donde se aprende a ser y a estar en la sociedad.sus oportunidades:
    La escuela como puerta de entrada a un mundo de posibilidades. Se aprende a ser y a estar en sociedad.

  6. Propicie un ambiente afectivo y seguro:
    Un clima emocional positivo, donde los estudiantes se sientan bien recibidos y no juzgados, es esencial para que deseen ir a la escuela

  7. Fomente la alegría de enseñar y aprender:
    Es crucial crear pedagogías que generen ganas de entrar al aula y de participar en las clases, más allá del esfuerzo o la exigencia

  8. Reconozca la individualidad de cada estudiante:
    Adaptarse a diferentes formas de aprender y reconocer las particularidades de cada persona es clave para motivarlos

  9. Promueva la conexión con la vida y el entorno:
    Abrir la escuela a la calle y sacar la escuela a la calle ya que el alumnado y el entorno potencian las necesidades de la comunidad y fortalece el aprendizaje y la convivencia

  10. Emocionar, enseñando:
    No
    decir que los quieres sino que sientan que los quieres.

UNA PENA QUE YA FINALICE EL CURSO ESCOLAR, AUNQUE TAMBIÉN QUEREMOS DECANSAR.
Fdo. Paco Llopis. Maestro.