El viernes 24 de noviembre a las 19:00 horas, el Salón de Actos del Centro Cultural Antonio Carpio acogerá la conferencia “Refugiados de Cerro Muriano Fotografiados por Robert Capa el 5 de septiembre de 1936 : Nacimiento del Moderno Fotoperiodismo de Guerra “, impartida por José Manuel Serrano Esparza y Juan José Obrero Castro. La actividad está organizada por la Asociación de Fotógrafos AFOMO.
Las fotografía hechas por Robert Capa a los refugiados de Cerro Muriano el 5 de septiembre de 1936 marcaron el nacimiento del fotoperiodismo de guerra. En la conferencia se abordará este tema y se proyectarán y comentarán una veintena de imágenes. La conferencia es fruto de una investigación de 28 años que se inició en 1995 y prosigue todavía y ha tenido el beneficio añadido de la aparición de muchas fotos nuevas, ubicaciones y detalles muy importantes de algunas imágenes que eran desconocidos hasta ahora.
El 5 de septiembre de 1936 Robert Capa hizo un impresionante reportaje fotográfico a los habitantes de Cerro Muriano (Córdoba) mientras huían del bombardeo del pueblo por parte de la aviación franquista y se dirigían a pie hacia la Estación de Tren de Obejo y El Vacar, en una terrible marcha bajo un sol abrasador y una temperatura de 40º C.
Estas fotografías de Capa marcaron el nacimiento del foto-periodismo de guerra con su pequeña cámara Leica II. El autor fotografió tanto a familias enteras (padres, madres, hijos, hijas, abuelos, abuelas, bebés en brazos, etc) como a personas de modo individual, captando con maestría y con un grado de proximidad desconocido hasta entonces, a personas inmersas en una terrible situación, intentando ponerse a salvo cuanto antes y con unas expresiones faciales que revelan miedo a la muerte, angustia, sudor a mares, tensión superlativa y una lucha por la supervivencia, en la que destacan especialmente ancianas que caminan a gran velocidad con sus bebés nietos en brazos y con sólo una idea en la cabeza : librarles del peligro cuanto antes.
Es impresionante el talento de Robert Capa como fotógrafo, moviéndose con gran rapidez y haciendo las fotos desde distintos ángulos con su pequeña cámara Leica II (Model D) formato 24 x 36 mm, acercándose al máximo a los seres humanos a los que fotografía, plasmando los momentos más significativos y creando unas imágenes atemporales que 87 años después de ser realizadas siguen conmoviendo una y otra vez a cualquier observador.
