Con el lema “XXV Años de Paz”, la Hermandad del Santísimo Cristo Resucitado y Nuestra Señora de La Paz, ha celebrado la salida extraordinaria de la Virgen como broche de oro a los actos celebrados, desde el pasado mes de enero, para conmemorar el veinticinco aniversario de la bendición de la imagen de la Virgen que se celebró el 24 de enero de 1999
La bellísima talla de Ntra. Sra. de la Paz es obra del Imaginero cordobés Antonio Bernal, una imagen barroca con semblante sereno, que transmite la Paz propia de la iconografía de la Resurrección, que sustituyó a una dolorosa que actualmente se venera en la Ermita de Belén bajo la advocación de Ntra. Sra. de los Ángeles. La nueva imagen significó un nuevo impulso para la hermandad de gloria que cierra la Semana Santa de Montilla.
Ver a Nuestra Señora de la Paz en la calle en septiembre, en un horario diferente al Domingo de Resurrección e iluminada por su candelería, nos ha dejado momentos muy emotivos que no se olvidarán.
A las 19:00 horas con el repique de las campanas de su Parroquia de Santiago, se abrían las puertas del templo para ver salir a Ntra. Sra. de la Paz, vestida con su manto de tisú-dorado y la saya bordada con hilos de colores. Además Llevaba varios estrenos, un Fajín bordado en hilo de oro, con la Cruz de Santiago y la inscripción “Regina Pacis”, del bordador Raúl Raigón Nadales, donado por un devoto y un Broche conmemorativo de la Coronación Canónica de la Paz y Esperanza de Córdoba, donado por la Cofradía.
La Paz salió al encuentro de sus devotos en un recorrido de más de cuatro horas que le llevó por calles estrechas y lugares muy significativos.
La primera parada la tuvo en las puertas del Colegio Salesiano donde la comunidad educativa, representada por el salesiano Francisco Mármol y el director del colegio Agustín de la Cruz, agradecieron que la Reina de la Paz se haya detenido a las puertas del colegio y rezaron por los niños y niñas y por el profesorado.
Continuó su recorrido por la Plaza de la Rosa para llegar a la Casa de San Juan de Ávila, al que le debemos esta advocación. En la capilla de la casa le esperaba el Coro CTP de la Parroquia de Santiago para dedicarle unos cantos, un momento muy emotivo.
Ya en la calle San Luis se detuvo ante el colegio donde la Comunidad Educativa, alumnado, profesorado y las religiosas realizaron una oración por el colegio, las familias y los enfermos. Continuó por Alta y Baja, Enfermería, Pozo Dulce, para detenerse a las puertas de San Sebastián donde le esperaba Ntra. Sra. de la Amargura que presidió la ofrenda floral de la Hermandad de la Misericordia.
Otro momento destacado fue en la Parroquia de San Francisco Solano donde la Hermandad hizo una ofrenda a los patronos y la Humildad y Caridad felicitó a la Paz con otra ofrenda. En la puerta del Santo le esperaba una petalada y fuegos artificiales.
Entre oraciones, petaladas y fuegos artificiales volvió la Virgen a la Parroquia.
Esperado fue su paso por la calle Don Diego de Alvear y el Colegio de La Asunción donde la comunidad educativa y las Esclavas del Divino Corazón se unieron en oración por las familias de Montilla. Ese momento sirvió como homenaje a la Familia Vázquez López padrinos de la imagen.
La llegada a la Parroquia de Santiago con el repique de campanas y de nuevo una sesión de fuegos artificiales puso el broche a una magnifica salida extraordinaria en la que Nuestra Sra. de La Paz estuvo acompañada por la Banda de Música Santa Cecilia de Montoro.
Informa: CarminaLeivaNuestraVoz