La primera fase no dejará el edificio en uso aunque sí preparado para una segunda fase que lo convertirá en un edificio vinculado al Turismo y a la Cultura Enológica.
El Alcalde de Montilla, Rafael Llamas y la Teniente de Alcalde de Infraestructuras y Urbanismo, Raquel Casado, han anunciado la “inminente licitación de las obras de estabilización y consolidación del Parador”, un edificio histórico, ubicado en un lugar estratégico, a las puertas de la localidad y, cuyas obras, tendrán “una duración de ocho meses y un importe inicial de 667.900 euros”.
Raquel Casado, ha explicado que como ya se avanzó, cuando se adquirió el Parador, “las obras que se pretenden hacer en esta primera fase son actuaciones de estabilización y consolidación para que no se siga deteriorando el edificio”, aunque “no quedará en uso ya que no está totalmente definido el edificio final”. En este sentido, Casado ha recordado que para la segunda fase “se está pendiente de unos fondos europeos que se han solicitado para convertirlo en centro de recepción de visitantes de la campiña”.
En este sentido el Alcalde ha manifestado que el compromiso de toda la corporación es estabilizar y consolidar el edificio, para ello el proyecto contempla la actuación urgente para controlar la ruina, se desmontarán los elementos inestables en peligro, se reconstruirán las cubiertas y sus estructuras y el atado de sus muros. En cuanto a las actuaciones de consolidación, se centran en los trabajos que sirven para recuperación de la envolvente y sus estructuras interiores, dejando a los edificios en condiciones adecuadas para evitar su deterioro progresivo.
Para Rafael Llamas, lo que “sí se tiene claro es que ha de ser un edificio vinculado a nuestro Turismo y a nuestra Cultura Enológica” y que por su ubicación, a la entrada de Montilla, el uso lógico sería como un Centro de Recepción de Visitantes, “uso que se complementará con espacios temáticos, destinados a la empresa y al desarrollo económico vinculado al turismo”, siendo esta actividad “una de las oportunidades de negocio que se pretende potenciar en Montilla”.
La superficie del Parador es de 1.082 m2, a los que se suma una parcela de 1.700 metros más, “espacio que se destinará a usos complementarios al edificio”. Para la segunda fase de obras, Llamas ha explicado que “el edificio se encuentra dentro de los Programas de Sostenibilidad Turística, que ha presentado Montilla, cuyo presupuesto está en torno a los 6 millones de euros, unos programas en los que tenemos puestas muchas esperanzas para culminar el edificio lo antes posible”.
Montilla recupera así parte de su historia. El Parador fue construido a mediados del siglo XIX por Francisco Solano Rioboó y Mena. En el año 1877, la vivienda ya se conocía como Parador de la Concepción, siendo un punto crucial para los viajeros de la época. De hecho, su nombre, conservado hasta el momento, viene de su uso primigenio, al ser precisamente un parador de diligencias de viajes entre Sevilla, Córdoba y Málaga.
